Científicos descubren sutil diferencia en cómo los monos perciben el mundo: ScienceAlert
Una nueva investigación ha descubierto una intrigante ventaja de la visión humana sobre la de nuestros primos simios. Gracias a pequeñas diferencias en la estructura de la retina, nuestros ojos son capaces de percibir una mayor gama de tonos azules.
Los hallazgos, informados por investigadores de la Universidad de Washington, la Universidad Médica de Viena y la Universidad de Sydney, arrojan luz sobre cómo han evolucionado los seres humanos desde que se separaron de los antiguos monos hace unos 25 millones de años.
«Aquí comparamos el conectoma sináptico para un circuito de codificación de colores en la retina humana con los circuitos comparables en monos tití y macacos». los buscadores escribir en su artículo publicado.
«Descubrimos un circuito en los humanos que está ausente en los titíes y mostramos además que para la retina humana, los patrones sinápticos no siguen la arquitectura canónica establecida en los monos macacos».
Los investigadores se centraron en una parte del ojo llamada fóvea, que forma un hoyuelo en la retina en la parte posterior del ojo que está lleno de células sensibles a la luz en forma de pequeños conos. Estos conos detectan ondas de luz y la fóvea es crucial para capturar detalles (al leer o conducir, por ejemplo).
Los diferentes tipos de conos están diseñados para manejar diferentes ondas de luz: cortas, medianas o largas. Estos conos trabajan juntos en diferentes combinaciones para crear los circuitos neuronales de sabor ligero que el cerebro procesa como color.
Los investigadores descubrieron que las conexiones entre los conos de onda corta y los conos de onda larga y media que existen en los humanos, un circuito sensible a la luz azul, suelen faltar en los titíes y macacos. También hubo otras variaciones menores en los circuitos neuronales en el trabajo.
«Nuestros resultados pueden ayudar a explicar por qué algunos aspectos de la percepción del color humano no se predicen bien a partir de estudios fisiológicos del sistema visual del mono macaco». escribir los buscadores.
Comme ils sont si étroitement liés à nous, les singes sont souvent utilisés dans les études sur la vue, mais cette nouvelle recherche ajoute certaines mises en garde qui devraient être prises en compte lorsque l’on essaie d’appliquer les résultats de ces études aux seres humanos.
Exactamente cómo y por qué ocurrió esta diferencia no se explora en este artículo en particular, pero los investigadores tienen algunas ideas. Los monos tendían a quedarse en los árboles, por ejemplo, mientras que los humanos exploraban el campo abierto; algunas características visuales pueden haber evolucionado para encontrar mejor comida y mantenerse con vida en ambos escenarios.
Los resultados de este estudio también agregan detalles interesantes a lo que sabemos sobre cómo procesamos la información visual y la enviamos al cerebro, y mirar el ojo a escalas aún más pequeñas debería generar nuevos conocimientos.
«Nuestros resultados predicen que las señales de color en la etapa inicial son distintas en la retina humana e implican que la resolución del conectoma humano en el nivel de nanoescala del cableado sináptico será esencial para comprender completamente la base neuronal de la visión del color humano». escribir los buscadores.
La investigación ha sido publicada en PNAS.