Clima: Cómo las tormentas de polvo aumentan el riesgo de fiebre del valle | Virginia
TEl escritor romano Vitruvio escribió que un viento malsano soplaba desde las marismas de la ciudad, trayendo enfermedades. Si bien esta antigua teoría miasmica de la infección fue reemplazada por la teoría de los gérmenes, los investigadores encontraron que las tormentas de polvo realmente pueden propagar patógenos.
Los científicos de la Universidad George Mason en Virginia están estudiando las tormentas de polvo en el suroeste de los Estados Unidos y su conexión con Fiebre del valle, una enfermedad fúngica que mata a cientos de personas cada año.
El equipo ha desarrollado un herramienta de muestreo de bajo costo: un molde para pasteles lleno de canicas, dejado afuera en una zona afectada. El polvo depositado por la tormenta se acumula en el fondo de la caja, en lugar de ser arrastrado por el viento. Las muestras de polvo acumuladas se analizan en busca de ADN del Coccidioides esporas de hongos que causan la fiebre del valle, lo que permite a los investigadores mapear su propagación en la región.
El equipo combina sus datos con información de la NASA. Espectrorradiómetro de imágenes de resolución moderada (Modis) Sensores de satélite. Modis puede medir la humedad del suelo y, por lo tanto, puede ayudar a determinar dónde son las mejores condiciones para el crecimiento de hongos. También puede rastrear el progreso de las tormentas de polvo y recopilar datos sobre la evolución de su distribución.
El trabajo refinará el Sistema de evaluación y advertencia de tormentas de arena y polvo para ayudar a predecir dónde es mayor el riesgo para las personas vulnerables.