Deporticos: Descubren con precisión la fecha de formación de la Luna: es 40 millones de años más antigua de lo que pensaban los científicos
Un nuevo estudio ha utilizado cristales traídos de la Luna por los astronautas del Apolo en 1972 para precisar el momento de la formación de la Luna. Los cristales son los sólidos más antiguos conocidos que se formaron después del impacto que formó la Luna. Se utilizó un método analítico llamado tomografía de sonda atómica para determinar la edad del cristal lunar más antiguo conocido.
El estudio retrasa la edad de la Luna en 40 millones de años, hasta al menos 4.460 millones de años. La datación radiométrica muestra que la muestra tiene aproximadamente 4.460 millones de años, lo que indica que la Luna tiene al menos esa edad. Los cristales de la superficie de la Luna deben haberse formado después de que el océano de magma lunar se enfriara.
Es importante saber cuándo se formó la Luna ya que desempeña un papel importante en nuestro sistema planetario, estabilizando el eje de rotación de la Tierra y afectando las mareas. Este estudio proporciona una pequeña pieza del rompecabezas en la comprensión de nuestra Luna y el sistema natural en general.
Este descubrimiento ha sido posible gracias a la tecnología de vanguardia utilizada en la investigación científica. Los científicos han empleado la tomografía de sonda atómica para analizar muestras de cristales lunares recolectados durante la misión del Apolo en 1972.
La tomografía de sonda atómica es una técnica que permite determinar la edad de los cristales a través de la medición de la desintegración de elementos radiactivos presentes en ellos. Esta tecnología ha permitido a los investigadores concluir que los cristales lunares tienen una edad de al menos 4.460 millones de años, retrasando así la edad de la Luna en 40 millones de años.
Este descubrimiento no solo brinda información sobre el origen y la formación de la Luna, sino que también ayuda a comprender mejor nuestro sistema planetario. La Luna desempeña un papel clave en la estabilización del eje de rotación de la Tierra, lo que afecta directamente a las estaciones y a la duración de los días. Además, la gravedad lunar es responsable de las mareas que observamos en nuestros océanos.
Con estos nuevos hallazgos, la ciencia ha dado un pequeño paso más en la comprensión del sistema natural que nos rodea. El estudio de los cristales lunares nos brinda información valiosa sobre la formación y evolución de la Luna, así como de otros cuerpos celestes en el universo.
En resumen, la utilización de cristales lunares recolectados durante la misión del Apolo en 1972 ha permitido a los científicos determinar la edad de la Luna con mayor precisión. Gracias a la tomografía de sonda atómica, se ha descubierto que estos cristales tienen una antigüedad de al menos 4.460 millones de años. Este descubrimiento aporta una parte importante del rompecabezas en la comprensión de nuestra Luna y del sistema natural en general.