MIT utiliza tecnología de fotografía del siglo XIX para crear hardware ‘camaleón’
Ingenieros del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) han reutilizado una técnica fotográfica del siglo XIX para crear material elástico que cambia de color cuando se estira.
El equipo allí dice que han desarrollado una técnica de fabricación escalable que le da a los materiales un «color estructural». La tecnología podría usarse en vendajes que controlan la presión, telas que cambian de color o robots sensibles al tacto.
Los científicos del MIT se inspiraron en el trabajo de Gabriel Lippman, a quien se le atribuye la primer color fotografía jamás creada en 1886. La técnica de Lippman utilizó holografía y fotografía.
Generó fotografías en color colocando una emulsión transparente muy delgada frente a un espejo que luego se expuso a un haz de luz que el espejo reflejaba a través de la emulsión. La interferencia de las ondas de luz entrantes y salientes estimuló los granos de la emulsión para reconfigurar su posición y reflejar el patrón y la longitud de onda de la luz de exposición.
Esta técnica creó imágenes coloreadas estructuralmente de flores y otras escenas en emulsiones. Sin embargo, el proceso implicó hacer las emulsiones a mano y esperar días para que el material estuviera suficientemente expuesto a la luz. Debido a la naturaleza laboriosa, la técnica no despegó. Aunque Lippman ganó un premio Nobel por su trabajo.
Más de 130 años después, el investigador del MIT Benjamin Miller se encontró con una exhibición de holografía en el museo del MIT.
«Me di cuenta de que lo que están haciendo en holografía es algo similar a lo que la naturaleza está haciendo con el color estructural», dijo Miller. relata Noticias del MIT.
Esta visita lo llevó a investigar la historia de la holografía y luego descubrió al físico franco-luxemburgués Lippman.
La holografía ha recorrido un largo camino desde la década de 1880, y Miller se preguntó si podría producir materiales estructuralmente coloreados a gran escala a partir de materiales holográficos modernos. Al igual que las emulsiones de Lippmann, el material holográfico actual está formado por moléculas sensibles a la luz que pueden entrecruzarse para formar espejos de colores cuando se exponen a los fotones entrantes.
El equipo pegó una película holográfica elástica y transparente y proyectó imágenes sobre ella. En lugar de tomar días, la película produjo imágenes grandes y detalladas en minutos, reproduciendo colores vivos de las imágenes originales.
A continuación, la película se podía despegar y, a medida que se estiraba, cambiaba de color. Sus estructuras a nanoescala se reconfiguran para reflejar longitudes de onda ligeramente diferentes, lo que hace que aparezca rojo y luego azul cuando se empuja y tira.
Usos del mundo real
El material que cambia de color se adapta fácilmente a los textiles, pero también podría usarse en vendajes. Por ejemplo, al envolver un vendaje alrededor de un brazo lesionado, el color podría indicar el sello correcto.
Créditos de la imagen: Todas las fotos cortesía del MIT.