Nueva teoría propuesta sobre el asteroide Vesta
Hay muchos asteroides grandes en nuestro sistema solar, y el llamado Vesta es el segundo más grande de todos. Vesta tiene aproximadamente 330 millas de diámetro. Se encuentra entre las órbitas de Marte y Júpiter. La NASA ha investigado previamente a Vesta con un programa llamado Dawn que se lanzó en 2007.
El propósito de la misión era para estudiar Vesta y Ceres, que son dos de un trío de protoplanetas conocidos en el cinturón de asteroides. Vesta tiene roca en su corteza y manto, así como un núcleo de hierro. Su tamaño y el hecho de que tiene corteza, manto y núcleo forman un grupo conocido como planetesimales. Los científicos creen que los planetesimales son los bloques de construcción a partir de los cuales se originan los planetas, como la Tierra.
Al estudiar a Vesta, los científicos pueden explorar las primeras etapas de planetas rocosos como el nuestro. Los científicos nunca presentan nuevas teorías sobre algunas de las características de la superficie de Vesta. Una de las grandes preguntas que los científicos querían responder era qué causó que se formaran los grandes huecos observados alrededor del ecuador del asteroide.
Estos huecos son circulares y pasan por alto dos cuencas de impacto masivas conocidas como Rheasilvia y Veneneia. Se cree que las dos cuencas de impacto se formaron al mismo tiempo por eventos de impacto. Las investigaciones han demostrado que los comederos y cuencas tienen un número similar de cráteres de diferentes tamaños, lo que indica que tienen la misma edad.
La nueva teoría sugiere que los valles se conocen como valles delimitados por fallas. Los científicos dicen que cada uno de los valles tiene un acantilado distinto a cada lado, lo que indica el deslizamiento de un bloque de roca. El equipo afirma que la roca puede agrietarse y formar huecos como se ve cerca del ecuador, que no se habían considerado anteriormente. Los científicos del proyecto dicen que los cálculos indican que la gravedad en el asteroide es demasiado baja para inducir tensiones para que la roca se deslice a poca profundidad. Por tanto, la física indica que las rocas se agrietaron.