Personas mayores en la nueva normalidad, cómo mejorar su bienestar
Dos ancianos y un acompañante pasean por el Paseo del Arga, en la localidad navarra de Huarte. EFE / Jesús Diges
el Fundación Edad y Vida, Con esta campaña ofrece pautas dirigidas al colectivo de personas mayores para ayudarles a mejorar su bienestar físico y emocional, y contribuir a su adaptación a la nueva normalidad.
En el marco de esta iniciativa, un decálogo de recomendaciones que se ha enviado a 31 centros residenciales de toda España.
El objetivo es apoyar a las personas mayores en esta fase de una nueva normalidad y dar pautas a los profesionales y cuidadores que los cuidan, así como a sus familias.
Durante los últimos meses el grupo de personas mayores ha sido el más vulnerable a la pandemia COVID-19, no solo por tener un mayor riesgo de sufrir síntomas graves, sino también por los problemas emocionales que ha supuesto el encierro, la desescalada y la incertidumbre en la situación actual de una nueva normalidad.
Alimentación saludable e hidratación adecuada
La Fundación Age & Life destaca que para mantener el bienestar físico es necesario seguir hábitos alimenticios saludables, señalando la Dieta mediterránea como ejemplo de variada, moderada y equilibrada.
Además, hay que dar protagonismo, no solo a lo que comes, sino también a cómo, cuándo, dónde y de qué forma se hace.
Por otro lado, teniendo en cuenta que esta campaña comienza en la temporada de verano, con un notable aumento de temperaturas, la necesidad de mantener un Hidratación adecuada, algo especialmente importante en los ancianos, ya que en ellos la sensación de sed disminuye.
Recuerde que la población masculina debe ingerir 2,5 litros de agua al día y las mujeres 2, aproximadamente; El 20% debe provenir de los alimentos y el 80% del agua y otras bebidas.
Además del agua, otras bebidas como infusiones, caldos, jugos o cualquier otra que aporte agua también pueden contribuir a la hidratación diaria, y se recomienda que sean bajas en calorías y sin azúcares.
Por otro lado, la necesidad de realizar ejercicio físico, adaptando el ritmo de la actividad a la forma física de cada persona y manteniéndonos siempre hidratados.
Bienestar emocional: rutinas, ejercicio y aire libre
También se pone especial énfasis en tener una buena salud emocional, utilizando el humor para reducir tiempos de estrés vivido en este tiempo de incertidumbre.
También es importante manténgase ocupado y establezca rutinas durante todo el día, además de aprovechar la tecnología para mantener un mayor contacto con el medio ambiente.
Estas rutinas diarias, además de las reuniones con amigos y seres queridos, incluyen la práctica de ejercicio físico y actividades al aire libre.
De esta forma, ayuda a mantener la estabilidad emocional y recuperar, por un lado, el nivel funcional después de tanto tiempo en interiores y con movimientos restringidos y, por otro, mejora el estado de ánimo y la sensación de bienestar general.
Por otra parte, exposición al sol En los momentos adecuados, tomando las debidas precauciones, ayuda a mejorar los niveles de vitamina D, necesaria para la absorción del calcio y para mantener una buena salud ósea.
Asimismo, este decálogo recuerda que las personas mayores que han estado expuestas al coronavirus, tienen un estado de salud vulnerable o patologías previas, deberían ser más cuidadoso y prudente en la adopción de medidas de protección y prevención.
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